Bienvenidos al blog del Grupo Joven de la Real, Servita y Franciscana Hermandad de la Soledad, de la Vera Cruz y de San Cristóbal de Villarrubia de los Ojos. Esta herramienta virtual pretende ser el reflejo del emprendimiento personal que un grupo de jóvenes de la Hermandad de "los blancos" ha querido llevar a cabo para colaborar en estrecha unión con nuestra cofradía. A través de esta página queremos, además, haceros partícipes de todos los proyectos e iniciativas que nuestra Hermandad desarrolla o quiere poner en marcha en un futuro próximo, así como diferentes actos relacionados con la Semana Santa de Villarrubia, declarada de Interés Turístico Regional desde 2014, y la religiosidad del municipio. Ante cualquier duda, queja o sugerencia, podéis dirigiros a la siguiente dirección de e-mail: grupojovensoledadyvera-cruz@hotmail.es







sábado, 15 de septiembre de 2012

Celebramos la festividad de la Virgen de los Dolores

15 de septiembre, con la vendimia recién empezada y las calles de nuestra localidad oliendo a nuestra esencia, a mosto, los villarrubieros tienen siempre una cita que no olvidan, aunque vuelvan cansados de una dura jornada en el campo. La parroquia de Nuestra Señora de la Asunción los espera, y allí su madre Dolorosa. 

La Hermandad de la Soledad y de la Vera Cruz celebra esta noche su tradicional función religiosa en honor a una de nuestra titulares, la Virgen de los Dolores. La eucaristía se celebrará a partir de las 20,30 de la noche. Antes, se rezará el santo rosario, los misterios dolorosos. Y al terminar la función, tendrá lugar el canto a la Virgen a las 21,15.

La festividad de Nuestra Señora de los Dolores se celebra el 15 de septiembre desde que fuera instaurada por la Iglesia Católica en 1715 (recordemos que también se celebra el llamado Viernes de Dolores, el viernes anterior al Domingo de Ramos). En este día de celebración se conmemoran los 7 dolores de la Virgen María. Tradicionalmente se han considerado los más profundos en la madre y en el corazón de Nuestra Madre Santísima. 

Los siete dolores de María Santísima son: 

1. No encontró María albergue en Belén, donde dar a luz a su hijo 

Los sufrimientos de María y su esposo José comenzaron ya en el duro viaje desde Nazaret a Belén y culminaron con el nacimiento del Rey de los cielos en un mísero establo, rodeado de animales. 

2. Una espada te traspasará el alma

A María, el profeta Simeón ya le anunció el sufrimiento que le perseguiría por causa de ese hijo que ofrecía en el templo. 

3. La huída a Egipto

Dos meses después del nacimiento de Jesús, el ángel avisó a José. Huíd con el niño a Egipto, el rey Herodes trata de matarlo. La seria amenaza de muerte que caía sobre su hijo hizo más angustioso el viaje de nuestra Madre María. 

4. El niño perdido y hallado en el templo

El evangelio nos ofrece estas palabras de María: Hijo mío, ¿por qué nos has hecho esto? Tu padre y yo hemos estado buscándote llenos de angustia. (Lucas 2, 48)

5. El encuentro de María con su hijo camino del Calvario

María sabía desde el nacimiento de Jesús que su hijo sería entregado por sus enemigos y condenado a muerte, en su viaje a Jerusalén. Fue informada por Jesús, como fueron informados los apóstoles, con la suficiente anticipación. En su alma llevaba un dolor insuperable, que se extendió al infinito cuando encontró a su hijo arrastrando una pesada cruz, camino del monte Calvario. 




6. La crucifixión

María estuvo en el Calvario y presenció la cruel y horrorosa muerte de su hijo. La espada de dolor atravesaba con toda su fuerza el aquel momento el corazón de María. 

7. La sepultura de Jesús y la Soledad de María

La inmensa soledad y el profundo dolor de María tras cerrarse las puertas del sepulcro donde yacía su hijo eran insuperables. Todavía martilleaban en su mente los clavos que sus manos y sus pies. Solamente su hijo resucitado podría devolver la vida a ese corazón destrozado. 


En nuestra hermandad, una cofradía mariana, estos siete dolores de la Virgen María constituyen una filosofía y una forma de entender el misterio de la Pasión y la Muerte de Cristo. Los tenemos presentes durante todo el año, de principio a fin. El segundo dolor de la Virgen María, "una espada te atravesará el alma", es el lema de nuestra Hermandad. El misterio doloroso que mejor representa y resume la vida de dolor y angustia que tuvo que padecer Nuestra Madre hasta la resurrección de su hijo,








jueves, 13 de septiembre de 2012

Villarrubia vive su semana de fiestas con su día grande pasado por agua


Uno de los sacerdotes durante las lecturas de la función religiosa
Últimamente la lluvia hace acto de presencia en nuestra localidad de la forma más inoportuna. El pasado día ocho, sábado, día en que celebramos la festividad de nuestra patrona, la Virgen de la Sierra, la tarde aparecía nublada. Pronto se acumulaban las nubes amenazantes sobre el cielo de nuestra localidad. A las nubes les siguieron los truenos, insistentes, cada vez más seguidos. La solemne procesión, prevista para las nueve de la noche, empezaba a retrasarse; y los cientos de villarrubieros que se congregaban, agolpados, por las calles del tradicional recorrido de la procesión empezaban a impacientarse y a preguntarse qué iba a pasar.
 Hacía muchos años que la procesión de la Virgen de la Sierra era suspendida. Después de muchas dudas, y con aproximadamente una hora de retraso, la procesión salía a la calle. Pero no pudo ser. Tras recorrer la primera calle, la Empedrada, un fuerte aguacero en forma de tormenta. Las gotan encharcaban las calles de Villarrubia y también el corazón de los lugareños, que no se resistían a abandonar la calle porque querían ver a su madre de la Sierra, a la que llevaban un año esperando.

A su paso por la casa consistorial, y con la lluvia cada vez más fuerte, los villarrubieros aplaudieron a la comitiva procesional. Las autoridades municipales y las bandas de música no dudaron ni un momento en acompañar a la Virgen de la Sierra a su vuelta a la parroquia de nuestra Señora de la Asunción.

La procesión no pudo ser, pero el resto de actos en honor a la Virgen de la Sierra trascurrieron con total normalidad. Por la mañana, la solemne función religiosa congregaba en nuestra parroquia a centenares de vecinos de Villarrubia. En esta ocasión, además, el encargado de presidirla fue el obispo de nuestra Diócesis, Antonio Algora. Numerosos párrocos de la localidad y las cercanías lo acompañaron.
Momento en que el obispo bendice la imagen de Nuestra Señora de la Sierra

Ofrenda floral por parte de las autoridades en la solemne función religiosa

El obispo de Ciudad Real junto a los numerosos sacerdotes que oficiaron la eucaristía



Esos sacerdotes habían sido los encargados de presidir el tradicional novenario en honor a la madre de la Sierra en los días previos.

Otro acto de carácter religioso, aunque también lúdico y religioso ha sido el tradicional Día de la Vendimia. El día nueve de septiembre se conmemora la festividad de Santa María de la Cabeza, esposa de San Isidro Labrador, y patrona de los agricultores. Villarrubia, tierra de viñedos y olivos, daba el pistoletazo al comienzo de la vendimia con la tradicional pisada de las primeras uvas, también se celebraba el concurso de racimos de uva y la agrupación folclórica Señora de la Sierra ofrecía su actuación en honor a Santa María, en pleno centro neurálgico de la localidad, en la Plaza de la Constitución.

La jornada del día 6 de septiembre fue especialmente emocionante para nuestra Hermandad. Una de nuestras hermanas, Loli Cañadilla, era la responsable de leer el pregón que da comienzo a las fiestas. Uno de los miembros más activos de nuestra cofradía, presidenta de la agrupación folclórica Señora de la Sierra y gran amante de la tradición y de las raíces populares de Villarrubia, Cañadilla invitó en su emocionante alocución a descubrir Villarrubia, su pueblo, el que siente tan dentro, con los cinco sentidos. ENHORABUENA LOLI.

El resto de la feria y fiestas transcurrió con total normalidad. Siempre recordando que estos días de especial convivencia con nuestra familia y amigos son días que debemos vivir con el recogimiento de rememorar a nuestra madre, la madre de todos los villarrubieros, la Virgen de la Sierra.