Jóvenes villarrubieros que participaron en la marcha |
A las 11 de la mañana daban comienzo los actos. Los jóvenes de Argamasilla recibían a los del resto de la provincia en el instituto Alonso Quijano donde todos dejaron sus pertenencias y recogieron las credenciales que les acreditaban como integrantes de la Marcha de Adviento.
Eucaristía presidida por el obispo de Ciudad Real |
Tras la comida y el tiempo de descanso de esa primera mañana de actividades, los jóvenes celebraron un “happening” o lo que es lo mismo, un recordatorio de lo vivido durante las “Jornadas en las diócesis” y la JMJ, celebradas durante el pasado mes de agosto. Después se vivió un tiempo de reflexión sobre la jornada. Tras la cena, comenzaba una parte fundamental en la Marcha de Adviento, la Vigilia, que comenzó a las 10 de la noche y en la que los cantos interpretados en comunión por todos los presentes jugaron un papel protagonista. Tras una agotadora jornada cargada de actividades de unión y convivencia, tomaba irse a dormir. Había que reponer fuerzas para el día siguiente, jornada en la que verdaderamente se celebraría la marcha.
Tras una oración matinal en la parroquia de la localidad ciudadrealeña, la Marcha de Adviento comenzó aproximadamente a las 10. Aproximadamente a las 12, la caminata concluía en Almodóvar del Campo (localidad natal de San Juan de Ávila). Los lugareños recibieron a los peregrinos con los brazos abiertos. A la una del medio día daba comienzo el acto litúrgico final de la XII Marcha de Adviento: una eucaristía muy emotiva presidida por el obispo de nuestra diócesis, Don Antonio Algora y concelebrada por distintos párrocos de los municipios de alrededor en la que también participó un impresionante coro que emocionó a los presentes con sus cantos.
La figura de San Juan de Ávila, nombrado Doctor de la Iglesia en 2011 por el Papa Benedicto XVI, estuvo muy presente en toda la ceremonia. Al concluir esta, el obispo y el responsable de Juventud de la Diócesis ofrecieron para besar las reliquias de San Juan de Ávila que se conservan en la parroquia.
Tras la eucaristía, que servía como colofón para dos días de fe y convivencia, se ponía punto y final a la Marcha de Adviento se con un almuerzo común que sirvió como despedida para los jóvenes de la comarca que habían estrechado sus lazos de amistad y sentimiento religioso en esas dos intensas jornadas.
Desde estas líneas, el Grupo Joven de la Hermandad de la Soledad anima a todos los jóvenes villarrubieros a formar parte de las actividades que se organizan desde la Parroquia de nuestro municipio ya que suponen verdaderos actos de vida de Iglesia.
Fue una marcha maravillosa, sin duda. Además que te lo pasas genial y conoces a muchísimos jóvenes con el mismo sentimiento que tú...
ResponderEliminarEsta Marcha nos ha ayudado, o por lo menos a mi, a conocer a gente tan estupenda, como los villarrubieros, que te ayudan a cruzar muros y baches, sin ellos darse cuenta (solo con su formar de ser ), para continuar en el buen camino que nos une a todos los jovenes.
ResponderEliminarEspectacular la labor de la gente de villarrubia y tambien la gente que lleba este blog, felicidades
ResponderEliminarDesde el Grupo Joven, muchas gracias a vosotros por seguir el blog día tras día!
ResponderEliminarAnimo a todos los jóvenes de Villarrubia a que se vengan con nosotros a estas convivencias, ya que, a parte de pasartelo muy bien, aprendes mucho y te sirve de gran ayuda.
ResponderEliminarQue Dios os bendiga, Feliz Navidad y Feliz año nuevo 2012!!