Tras meses de intensas jornadas de ensayo, los miembros de la Hermandad de la Soledad, de la Vera Cruz y de San Cristóbal pusieron todo su empeño en haces que la noche de ayer se convirtiera una noche mágica en la que los ingredientes predominantes fueron el humor, la música, el baile y, sobre todo, el sentimiento de hermandad.
El festival cultural en honor a San Cristóbal daba comienzo en torno a las diez y media de la noche, con la pista municipal de baile abarrotada. Abrían el espectáculo más de una treintena de niños, los hermanos más jóvenes de la Hermandad, que interpretaron una canción de la nueva película de Los Pitufos. Los niños disfrutaron enormemente y los padres se sintieron enormemente orgullosos, algunos de los pequeños debutaban encima del escenario.
Tras la actuación infantil, el primer sainete de la noche abría la veda de las risas y el humor más desternillante. Posteriormente, las parejas de baile que tradicionalmente colaboran con nuestra hermandad, daban una lección de buen hacer, de elegancia y profesionalidad sobre el escenario interpretando la canción “Bailemos un vals”.
También pudimos ver otro número musical interpretado por otro grupo de niños, de mayor edad, que al ritmo de las canciones conocidas por todos del fenómeno televisivo High School Musical hicieron las delicias de todos los asistentes.
A continuación, un nuevo sainete llenaba de carcajadas el auditorio. Después los jóvenes de la hermandad, entre ellos un miembro de nuestro Grupo Joven, interpretaron la canción “Whine up” de Kat de Luna con Elephant Man en un despliegue de luz, color y complicadas piruetas.
Llegando al final del festival cultural, de nuevo las parejas de baile dejaban al público “con la boca abierta” interpretando esta vez ritmos latinos con la canción “Para toda la vida” de Marcela Morelo. El último sainete de la noche, escrito y dirigido por Hipólito Medina, quien nos deleitó con algunos de sus más famosos chistes, reunió a casi todos los miembros del Equipo Directivo de nuestra Hermandad sobre el escenario.
El broche de oro a esta divertida noche lo puso la actuación final. Una interpretación de una de las canciones de la paródica película hollywoodiense Sister Act en la que los miembros de la Hermandad se transformaron en auténticos intérpretes de música góspel.
Una noche inolvidable en la que los asistentes pudieron observar como a través del empeño, del tesón y del trabajo duro, los miembros de la Hermandad de la Soledad, de la Vera Cruz y de San Cristóbal se convirtieron en auténticos artistas.
A continuación os dejamos algunas instantáneas que retratan momentos inolvidables de la noche:
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Los más pequeños convirtieron el escenario en una auténtica fiesta al ritmo de High School Musical |
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Uno de los sainetes que nos remonta a las vestimentas de nuestros abuelos |
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En el festival en honor a San Cristóbal tampoco faltaron los animales |
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Entre bambalinas se podían respirar los nervios antes de cada actuación |
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Detalle de dos de las intérpretes de otro de los sainetes |
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"Un muerto muy vivo" |
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El comienzo de la actuación de nuestros jóvenes |
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Otro momento de piruetas en mitad de la actuación |
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Las parejas de baile interpretan "Para toda la vida" |
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Final del último sainete que reunió a casi todos los miembros del Equipo Directivo de "Los Blancos" |
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Momento culminante de la actuación que puso el broche final al festival cultural en honor a San Cristóbal |
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Los miembros del Grupo Joven no quisieron faltar en una noche tan especial para la Hermandad |
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